El agua es un elemento de la naturaleza fundamental para la supervivencia de los humanos y de la gran mayoría de los organismos del planeta. Un 70% de la Tierra está formada por agua y un 70% de nuestro cuerpo está compuesto por este líquido esencial que nos permite realizar las funciones vitales. Por ello, cada 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, promovido por Naciones Unidas, con el fin de concienciar a la sociedad sobre la importancia del agua dulce, la crisis mundial del agua y la defensa de la gestión sostenible de los recursos.

El lema elegido en este año 2022 es “la importancia del agua”, que hace referencia a una realidad en la que más de 2 millones de personas no tienen acceso al agua potable y de calidad. El foco de atención esta vez se centra en las aguas subterráneas, como los acuíferos, decisivas para el buen funcionamiento de los ecosistemas, como los humedales y los ríos. Es necesario reivindicar la protección de estas aguas y su explotación de forma sostenible para poder cubrir las necesidades de la población e intentar reducir los efectos negativos del cambio climático.

Por ello, este día pretende visibilizar la necesidad de buscar medidas que ayuden a alcanzar el ODS número 6, relacionado con el agua y el fomento del saneamiento transparente y democrático para todos antes del 2030 con el objetivo de garantizar vidas más saludables y proporcionar un acceso universal y equitativo del agua potable.

El proyecto LIFE Ecodigestion 2.0 y el aprovechamiento del agua

En esta línea, el proyecto LIFE Ecodigestion 2.0., apuesta por el modelo de economía circular basado en un sistema de control automático para la dosificación de residuos orgánicos en digestores anaeróbicos de EDAR, con el objetivo de maximizar la producción de biogás, generando energía verde. El proceso del sistema del proyecto respeta la naturaleza y mantiene su equilibrio, ya que la depuración de lodos es más eficaz y sostenible. Además, este sistema de dosificación permite que la generación de fangos de depuradora sea más eficaz, logrando reducir la carga contaminante del agua y las emisiones de gases de efecto invernadero que pueden dañar los ecosistemas y las aguas subterráneas.

Gracias al reaprovechamiento de residuos, se logra dar solución a problemáticas contaminantes como el exceso de purines de cerdo, cuyos nitratos y nitritos, si no se gestionan de manera adecuada, frecuentemente son absorbidos por la superficie terrestre y terminan contaminando aguas subterráneas. Derivarlos a depuradoras cercanas para su correcto tratamiento ayuda a dar respuesta a este desafío ambiental que ya ha obligado a explotaciones ganaderas a cerrar sus negocios.

De este modo, este proyecto contribuye a la potenciación de varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y del Pacto Verde Europeo. Entre ellos, el saneamiento del agua, la acción por el clima y el cuidado de la vida de ecosistemas terrestres mediante la obtención de energía no contaminante y la creación de empleo verde favoreciendo el crecimiento económico sostenible y, por ende, apoyando a comunidades energéticamente más comprometidas con el medio ambiente. En definitiva, se suman esfuerzos de acción climática a través de la cooperación transnacional.

Sobre LIFE Ecodigestion 2.0

El proyecto LIFE ECOdigestion 2.0 presenta un sistema digital de control automático para la dosificación de residuos orgánicos en digestores anaeróbicos de EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) para maximizar la producción de biogás bajo demanda como energía renovable. Este proyecto cuenta con un presupuesto de más de 970.000 euros. El proyecto piloto, que tiene una duración de cuatro años (2020-2024), está liderado por Global Omnium Medioambiente (España) y tiene como socios a la Fundación Finnovaregio (Bélgica) y Águas do Centro Litoral (Portugal). La producción de biogás para cubrir la demanda energética y reducir la cantidad de residuos en vertedero contribuye al cumplimiento de la Directiva Europea Landfill.